Creí que me iba a quedar sin hacer fotos este finde y ya me estaban dando los "siete males”.
Así que ayer, después de haber visto el parte meteorológico, me puse me contacto con Mariqui del Pazo de Cea, por si me podía acercar el día de hoy a hacer alguna foto. Hace algunos meses, me puse en contacto con ella, para preguntarle si podía usar el pazo como estudio fotográfico natural, ya sabéis, para esos retratos que hago, esas fotos al vuelo.
Me dijo que estaria encantada. El sitio, como podéis ver, es una pasada y tenia muchas ganas de hacerle fotos, buscar rincones, esos donde poder haceros unas fotos, buscar esos pequeños detalles, ese farolillo, la hortensia en una mesa, esas flores de Camelio por el suelo a los pies de un banco de madera. Esa piedra por la que han pasado tantos años y han vivido mil historias.
He prometido volver, ya que me queda mucho por descubrir.
Si tenéis en mente cualquier celebración o evento, estoy seguro que esté es vuestro lugar, poneos en contacto con Mariqui y ella os abrirá las puertas del Pazo de Cea
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