A veces solo hace falta....

Un piano, unos dedos, una guitarra y una voz… eso fue lo que nos encontramos este sábado en La Pecera, a Turnes & Casquero, que nos ofrecieron un recital de R&B con una fuerza increíble.

Mucho por hacer

Empezó el año 2019 con un nuevo proyecto dando vueltas en mi cabeza,..quería darle forma, ponerlo en marcha, .pero a la vez comenzamos a vivir en otro lugar. En Enero, nos trasladamos a Baiona, un pueblo tranquilo, luminoso, privilegiado para vivir.. Un lugar donde poder disfrutar de la bicicleta para ir a tomar un vino, pasear por la playa, ver unos increíbles atardeceres.

Pero mi cabeza seguía dándole vueltas a lo mismo, hasta que un buen día me sorprendiste con un..

"me apunto a ese proyecto".... 

A partir de ese momento, las cosas empezaron a fluir lentas pero seguras... 

El año iba pasando. En Semana Santa nos acercamos a Navarra a conocer el Valle del Baztan y las Bárdenas Reales, también viajamos a bonitas ciudades  del País Vasco, a León, Asturias, y seguimos con nuestras rutas de senderismo y excursiones por nuestra siempre sorprendente Galicia, conciertos con Carlos Nuñez en el Parador de Baiona, Jazz a orillas del estuario del Miñor, unas cervezas en Oía al pie del monasterio mientras el sol se ponía por el horizonte…y por supuesto disfrutando a menudo del  San Yago navegando por nuestras Rias. 

Y ahora, cuando ya se acaba el año, ese proyecto, "el Orion," ya está en marcha. Somos un gran equipo, y aunque  confiamos en que saldrá adelante porque nos sobra ilusión y sobretodo ganas de trabajar....también sabemos que queda..

.. Mucho por hacer...

Volando

Ya han pasado cuatro años. Cuatro años desde que nos acercamos a O Courel para hacer una ruta entre los colores del otoño. Cuatro increíbles años juntos descubriendo lugares nuevos, escuchando, riendo, soñando… viendo atardeceres y paisajes increibles.

Cuatro años que han pasado volando

Vamos

Y porque no. Así que picamos algo por la zona, y nos dirigimos a la Pecera. Allí actuaba un grupo llamado Greenwater… no teníamos ni idea de quienes eran, pero la verdad es que fue todo un acierto, un concierto vibrante e increíble que nos hizo retrotraer a los años 70. Por eso la próxima vez que me propongan ir a un concierto de alguien desconocido, sin dudarlo, diré… vamos.

Salir a pasear

Salir a pasear

Así de fácil. Subirse a la bicicleta, ir a tomar una cerveza y a la vuelta, encontrarse con en XIII Festival de Jazz de Nigrán. Todo un lujo escuchar a Deborah Carter, en una noche estrellada de verano.

Solo tuvimos que salir a pasear.