domingo, 3 de enero de 2016

Cuando menos te lo esperas

Cuando menos te lo esperas

Llevo un largo tiempo delante del teclado y mirando la pantalla, tratando de ordenar ideas y vivencias que se agolpan en mi cabeza, e intentar contaros lo que ha sido este año 2015. 

Y podeis creerme si os digo que es difícil conseguirlo en unas pocas lineas. Si el 2014 fue increible, lo habreis leido en el post del año pasado "Reflexiones en voz alta", este año que se acaba, lo ha superado con creces.

Ha sido un año intenso, vivido mes a mes, dia a dia e incluso hora a hora, hasta el ultimo minuto de este 2015.

Al principio pensé en ir tomando notas, pero ahora me doy cuenta, que quizás no me hayan hecho falta.

Ya utilice en estas entradas la misma frase. ¿Por donde empezar? Pues por el principio.

El año empezó en Valencia, ya que mi amigo Juan me invitó a pasar un fin de año en familia y de paso grabar un episodio de Visiones de un Viajero. Fue algo improvisado y unas navidades diferentes.

Luego empezamos una nueva edición del Camiño dos Faros, donde seguí encontrando y conociendo gente nueva, gente sana. Ha sido maravilloso caminar con ellos, captar con la cámara esas miradas, esos pensamientos, los increíbles paisajes que tiene esta costa mágica, y que podemos disfrutar gracias a la genial idea, al sueño de un grupo de locos, que con su esfuerzo, nos ha descubierto a muchos de nosotros que tenemos una tierra maravillosa y una gente increible.

En mayo el San Yago ya estaba listo. Fueron unos meses de restauración, lentos, que parecía que nunca se acababan. Me había pasado un pelin del presupuesto, pero bueno, es mi niña y no le podía negar nada. Estaba convencido que me iria bien. Tenia y tengo, gente a mi lado que me apoya en este proyecto y aunque, como sabéis, no quiero nombrar a nadie, por esto de que no quede gente fuera, tengo que dar las gracias a Nacho e Ivan, de Nautico Cormoran.

Cada charter con el San Yago fue distinto. Se subió gente diferente, de sitios dispares. ¿Y sabéis lo mas maravilloso? Que a pesar de estar acostumbrado a ver la ria de Vigo, las Islas Cies, las distintas playas que tenemos, este año volví a descubrir el paraíso en el que vivimos a través de las miradas de admiración de la gente que se ha subido al barco.

Y por supuesto no puedo olvidarme de mi familia de Cee, Conchi y Antonio, que tuvieron la osadia de contar conmigo para integrar el equipo de Antonio Ambaoade Fotografia. Os juro que me lo paso genial y tambien, como no, me contagio de esa emoción que siempre flota en el ambiente, de esas capillas o carpas al aire libre. Dejarme suelto para tratar de captar esa miradas emocionadas, ha sido todo un sueño. Pero aun tengo mucho que aprender y debo de agradecerles a los dos su infinita paciencia con mis meteduras de pata , cruzandome a veces incluso delante de la cámara.

Llega septiembre y a empezar otra vez con las caminatas y , de nuevo, poder ver esas sonrisas. Percibir como cambia la luz y porque no, combinarlas con salidas en el San Yago. Visitar las Cies fuera de la época estival, es una experiencia que no deberíais de perderos ,caminar solos por ese paraíso, sin gente......

En octubre..... La improvisacion, ya que tenia otros planes, me llevo a cumplir una asignatura pendiente, conocer la Ribeira Sacra. Os puedo asegurar que es la mejor decisión que he tomado en mi vida. Tengo que volver para poder captar mejor esos paisajes con bruma, esa neblina que se desprende de los viñedos, esa luz…

En noviembre por fin conoci O Courel. Decir que quede impresionado, es quedarse corto. Espero volver en primavera y poder contemplar la explosión de colores que se percibe en esa época del año. Fue un fin de semana completo, luz, color y un remate muy especial.

Pero lo mejor de todo, como siempre, la gente que he conocido y sigo conociendo. 

Y no me cansaré de repetirlo, gente increible, cada una con su historia particular, sus problemas, sus alegrias y tristezas. Gente, que sin saberlo, me ha aportado confianza, seguridad, que me ha enseñado que por mucho que nuestros miedos, inseguridades o bajones, intenten arruinarnos el día, siempre hay alguien cerca de ti, que aún habiéndolo pasado peor, no pierde esa sonrisa y sigue luchando por salir adelante. Esa gente, es la que me animo a seguir por este nuevo camino que emprendi hace dos años, con una sonrisa permanente pintada en la cara.

Y a ti, una vez mas, quiero darte las gracias por estar ahi, porque estoy acabando el año de una manera espectacular y muy especial.

No sé, me da un pálpito que este año que estrenamos, va a ser mucho mejor y seguro que empezará otra etapa nueva.

Ya sabes, lucha, vive, disfruta, rie y no dejes de perseguir tus sueños, porque aunque no te lo creas, se cumplirán cuando menos te lo esperas.